El Museo militar cuartel El Zapote, guarda tesoros de la milicia que, en forma silenciosa, cuentan una parte de la historia salvadoreña. Ahora que casi terminan las vacaciones, aproveche el tiempo visitando el acorazado de cemento, que todo el año se mantiene abierto y su ingreso es gratis
Cada uno de los objetos que en este museo se exhiben tiene un valor más allá del monetario; no importa si es un sable de finales del siglo XVIII, una pistola desvencijada, los cascos antiguos, las ametralladoras de principio del siglo XX o las armas que utilizaron los insurgentes del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMILN); todo tiene un valor histórico.
Y para aquellos que nunca han visitado este lugar, hoy es un momento oportuno para conocer otra parte de la historia salvadoreña, el de las armas, además de conocer ese recinto que tiene un atractivo arquitectónico
Sólo este ex cuartel guarda crónicas y eventos que ya quedaron casi en el olvido, como las veces que defendió con ahínco a los presidentes que eran amenazados con un golpe de Estado, o las ocasiones que este cuartel se sublevó.
Con la fundación de ese cuerpo militar, denominado Legión de la Libertad, hubo necesidad de albergar la tropa, por lo que El Zapote fue escogido en 1898 para construirle una galera de lámina en lo que antes era una loma donde abundaba el árbol de zapote.
Sólo este ex cuartel guarda crónicas y eventos que ya quedaron casi en el olvido, como las veces que defendió con ahínco a los presidentes que eran amenazados con un golpe de Estado, o las ocasiones que este cuartel se sublevó.
De principio a fin, el Museo Militar es un lugar para descubrir cosas e historias que sacudieron a este país. De hecho, este sitio guarda en sus entrañas el pasado prehispánico, el cual ha quedado demostrado con los restos de cerámica encontrados aquí cuando se han hecho trabajos de remodelación, menciona el teniente coronel Adalberto E. García Rivera, jefe del Departamento de Historia Militar.
Después fue sustituida por una casa de madera. Veinte años más tarde, el arquitecto Borromeo Flores comenzó la construcción del cuartel El Zapote, con un estilo que semejaba a los castillos del Medioevo. El edificio fue hecho con cuatro torres, una en cada esquina, y dos en su fachada.
Este edificio militar ha sido el centro de operaciones de tres instituciones castrenses: caballería, artillería y transmisiones de la Fuerza Armada.
Debido a esto, el ex cuartel El Zapote, y ahora el Museo Militar, es un bien cultural, como parte del complejo cultural recreativo de San Jacinto. Luego está el hecho de ser uno de los primeros sitios donde se establecería el nuevo ejército salvadoreño, formado por Manuel José Arce en 1824.
Con la fundación de ese cuerpo militar, denominado Legión de la Libertad, hubo necesidad de albergar la tropa, por lo que El Zapote fue escogido en 1898 para construirle una galera de lámina en lo que antes era una loma donde abundaba el árbol de zapote.